ANÁLISIS Y COMENTARIOS

LA ATRACCIÓN POR LO FEO

Existe también otro criterio estético, ya no asociado a una exageración de la hermosura, sino más bien al encumbramiento de lo morboso y lo feo. En los medios masivos de comunicación se muestra palpable, por ejemplo, en programas de televisión al estilo documental, que hacen un recorrido permanente de submundos sórdidos y carcelarios, no para alertar y buscar soluciones, si no como un mero regodeo visual.
El fenómeno de las tribus urbanas está emparentado con esta realidad, José María Aguerre, profesor de Filosofía, enfatiza que la diferencia entre los movimientos de hace unas décadas y los actuales es que en los primeros había una ideología detrás. En cambio, en los segundos existe una ausencia de sistema de creencias.
"Pero si se dá una especie de adoración de lo oscuro y de lo feo, en el corte de pelo, en el uso del negro. La cuestión de fondo es que, detrás de estos chicos no hay una ideología sino un vacío expresado en frases como 'tengo que cortarme o lastimarme para sentir'. Aparece una incitación al suicidio y la necesidad de lastimarse como una forma de encontrarse con el sentir".alerta. Aguerre explica que esto se manifiesta en una determinada moda externa, bandas de rock con mensajes suicidas, música oscura, idea de dañarse el cuerpo y colocarse piercings en lugares donde provoca dolor como labios, lengua, genitales, pezones.
"La diferencia entre el punk y el emo, por ejemplo, es que el primero se entusiasmaba con la ideología anarquista y se sentía un revolucionario. Un chico de 16 o 17 años que es emo, desconoce esto. Lo que hay es vacío y una clara estética autodestructiva, de lo monstruoso y deforme", concluye.

Fragmento del artículo "Los criterios de belleza actuales" escrito por Teresa Cazenave en la revista CRECIENDO EN FAMILIA, N° 15,  agosto 2010.




25 de agosto de 2010
DIARIO LA MAÑANA BOLIVAR




El Instituto Jesús Sacramentado organizó el viernes una conferencia a cargo de la cual estuvo el profesor José María Aguerre, referida al tema de las adicciones y algunas prácticas juveniles nocivas. Por la mañana se realizó un encuentro con chicos de todos los niveles de la institución y por la tarde, fueron invitados los padres.
El encuentro apuntó a ver los desafíos a los que se ven expuestos los chicos en estos tiempos, precisó Aguerre en un breve diálogo mantenido con los medios, momentos antes de la disertación para padres.
"Vivimos en unos tiempos difíciles en los que muchas veces los problemas y las angustias que tenemos los adultos impactan en nuestros jóvenes  que indudablemente lo manifiestan a su modo. En los más chicos aparecen los abusos de Internet, los abusos del ciber, en los mayores problemas de comunicación personal, problemas en la alimentación. De alguna manera se pone la vida en riesgo porque se teme más a crecer que a morir",  manifestó Aguerre.
Otro de los ítems de la charla para adultos, en los que hizo hincapié el profesional, tiene que ver con la ayuda que deben prestar los mayores para que los chicos y jóvenes decodifiquen la gran oferta de información que aparece en los medios que todos o la mayoría tiene a su alcance.
"Otro de los problemas son los modelos que les ofrecemos a los chicos, lo que les permitimos por omisión, a veces. Este es un tiempo difícil, en donde pareciera que la vida comenzara a perder su  valor. Es como que los chicos le tienen miedo a crecer. Se habla mucho de que los adolescentes no crecen. Yo me pregunto: ¿les damos razones para que quieran crecer?", finalizó.
Por su parte la directiva María Inés Legorburu, enmarcó la charla en la necesidad de la institución de capacitarse (los docentes) para "poder acercarnos a los chicos, comprenderlos y acompañarlos".


DIARIO LA MAÑANA BOLIVAR



Un profesional especializado en adolescencia hará un taller para jóvenes y adultos, en distintos turnos en el Colegio Jesús Sacramentado.

El viernes 20 a lo largo del día se realizará una jornada sobre cultura adolescente en el Instituto Jesús Sacramentado, que será coordinada por el licenciado José María Aguerre.
La profesora Natalia Mancina, directora del nivel Medio de ese establecimiento educativo explicó que el coordinador realizará actividades durante la mañana y la tarde con estudiantes de la secundaria. La educadora fue enfática al indicar que "la idea que tenemos es que para poder ayudar a los adolescentes a transitar esta etapa tan difícil y llena de cambios, lo importante es conocer qué es lo que piensan, cómo lo hacen, qué cosas les resultan preocupantes y que a nuestros ojos de adultos no lo son".
Durante la mañana trabajará con los estudiantes de segundo, tercero y cuarto años de la Escuela Secundaria, posteriormente lo hará con los chicos que asisten a la Secundaria Básica.
En tanto que a las 18.30 en el salón de actos del colegio se llevará a cabo un encuentro con padres, docentes y directivos. El objetivo de la reunión es conocer para aprender, acompañar y guiar a los jóvenes durante esta etapa de grandes cambios que es la adolescencia. La propuesta es abierta además para toda la comunidad, aún cuando no posean hijos cursando estudios dentro de esa entidad y es libre y gratuita.
Finalmente Mancina comentó que Aguerre tiene un amplio conocimiento en cuestiones relacionadas con los jóvenes, ha realizado investigaciones sobre ellos y también a la cultura a la que acceden, por caso a la música, y de la tecnología, por ejemplo Internet, a fin de conocerlos también desde ese lugar.

José María Aguerre
Es profesor de filosofía por la Universidad Católica Argentina, realizó post grados en la Católica del Sacro Cuore en Milán, becado por el gobierno de Italia y en la Universidad Nacional de Barcelona obtuvo el diploma en estudios avanzados, equivalente al master.
Fue rector del colegio secundario Santo Tomás de Aquino de la Universidad Católica Argentina y directivo de la Católica de la Plata.
En el ámbito pedagógico participó como delegado nacional en el Congreso Pedagógico Nacional de Embalse Río Tercero. Actualmente se desempeña como tutor de la Facultad de Derecho de la UCA mientras dicta cátedra de filosofía, ética y metafísica en esa facultad, en los institutos de Ciencias Políticas y Comunicación Social y en las facultades de Ingeniería, y Ciencias Económicas de la UCA. Participó del Encuentro de Rectores organizado por el Consejo Superior de Educación Católica (CONSUDEC).
Dicta conferencias relativas a temas educativos, filosóficos y de la cultura adolescente en colegios, universidades y empresas de Buenos Aires y del interior.

DIARIO EL POPULAR OLAVARRÏA

17  de abril sde 2010




El filósofo y docente José María Aguerre
"Los adolescentes deben aprender a pensar por sí mismos"
Habló de la importancia de generar vínculos sólidos y permanentes. La familia y la amistad son los pilares de la vida de un adolescente. Y ayer habló con chicos, padres y docentes para mejorar las relaciones y aprender a no vivir masificado.
"Hay que insistir con que ellos puedan pensar por sí mismo, sin masificarse", aseguró el profesor José María Aguerre, quien ayer disertó frente a alumnos del Colegio Libertas sobre "Filosofía, música y sentido de la vida". Más tarde, el encuentro fue con los padres y docentes, para abordar el tema "Desafíos de la cultura adolescente". Aguerre fue invitado por la institución secundaria para abordar junto con los jóvenes las problemáticas adolescentes y en diálogo con EL POPULAR comentó que las letras de las canciones que habitualmente escuchan los chicos fueron el eje del debate.

"La temática elegida fue hablar del sentido de la vida, tomando su música, el rock, el reaggeton que transmiten mensajes de manera muy fuerte y dura. Esto expresa la necesidad de valores, de un destino y de trascender, por eso es necesario un encuentro que empieza con la familia, sigue con los amigos y se abre a la relación con Dios".

Aguerre es profesor de Filosofía de la Universidad Católica Argentina, ha realizado estudios de postgrado en universidades de Italia y España y cuenta con una destacada trayectoria. Es delegado nacional del congreso pedagógico nacional de Embalse río Tercero, ha dictado conferencias relativas a temas educativos y de la cultura adolescente en colegios y universidades de Buenos Aires y del interior del país, destacándose su participación en los encuentros de rectores organizados por el Consejo Superior de Educación Católica.

El filósofo insistió que "en primer lugar es importante insistir en que deben pensar por sí mismos. Y el segundo encuentro fue para generar un espacio de encuentro entre padres, docentes y alumnos a través de la música. Primero ver los padres por donde pasa el camino de sus hijos. No sólo la música sino la computación, el ciberespacio. A la tecnología no hay que temerle pero si conocer y acompañar a los hijos".

Para el docente, es fundamental abrir un canal de comunicación y diálogo con los jóvenes. Y en ese sentido, los adultos tienen una gran responsabilidad. "El desafió es recuperar el valor de la familia, una familia herida y en crisis pero que tiene que ser un ideal de vida. Aprender de lo que nuestra generación ha sufrido, para no hacer lo mismo sino mejor. Es el deseo de todo papá, es mi deseo también. Por otro lado, es necesario valorar el encuentro interpersonal con el otro, yo le decía a los chicos la importancia de los amigos, de un noviazgo donde el ´te quiero´ tenga un dejo de eternidad, un compromiso. Un compromiso que si parte de lo familiar, se continúa con la amistad, se hace político y hace patria", subrayó Aguerre, con marcado optimismo.

La intención del encuentro fue provocar un pensamiento reflexivo de parte de los alumnos. "De allí vendrán los comentarios y serán los profesores quienes deban acompañarlos en su reflexión".

Desafíos presentes y futuros

Para el docente, los desafíos pertenecen al mundo adolescente pero también al adulto. Incluyen "cómo encarar un mundo donde todo se ha relativizado, donde son muchos los que les proponen caminos alternativos de evasión, adicciones, anorexia, los problemas de alimentación, todas esas cosas fueron consideradas en la mañana y la tarde. Forman parte de la vida de un adolescente".

Los chicos escucharon canciones, leyeron sus letras y analizaron el mensaje de la música. "La preocupación mayor de padres y docentes hoy por hoy es que en muy pocos años se ha generado un abismo generacional. Siempre hubo diferencias pero ahora nos lleva a querer a nuestros hijos pero no saber en qué están, una gran ingenuidad que impide la comunicación. Cuando le decimos algo a nuestros chicos lo decodifican de otra manera. A veces no sabemos bien en qué andan hasta que suceden cosas graves".

Para Aguerre, los principales responsables de la vida adolescente son los adultos. "Traer hijos al mundo implica un compromiso y una entrega total. A veces por ingenuidad, otras por negligencia de no ocuparnos por temor a perder su cariño, nosotros somos los responsables como mayores de lo que puede suceder".

La crisis social y de valores es fundamental. A nivel educativo, Aguerre consideró que "muchos docentes nos limitamos a cumplir con lo que nos pide el sistema educativo y vamos abandonando lo que nos motivo como docentes que es dar todo por el otro". Y sobre eso es necesario trabajar y cambiar.


LEY DE MATRIMONIO ENTRE PERSONAS DEL MISMO SEXO


No podemos quedarnos ni quietos ni en silencio frente al constante afán de confrontación del gobierno y a la confusión que, utilizada políticamente, hace que muchos de nuestros compatriotas malinterpreten, incluso con buenas intenciones, el llamado a defender la institución natural del matrimonio y la familia.
Es este el momento de decir basta de manipulación; basta de querer naturalizar lo innatural para relativizar todos los valores; basta de individualismo masificado que conduce a pensar sólo en lo que a mi me conviene olvidando el bien del otro. Individualismo que se esconde detrás de la prédica de una falsa tolerancia, que es sin embargo soberana indiferencia. La tolerancia, virtud cristiana, mal que a algunos les pese, nos lleva a respetar al otro, pero no al error. Menos aún si dicho error lastima al prójimo. Si considero que alguien que me es querido se equivoca y tuerce el rumbo de su vida, si es mi amigo, intentaré no por la fuerza pero sí, por medio de testimonio y razones hacerle ver su error. No es preocupación real por el bienestar del otro lo que hoy vemos, sino un que cada uno haga lo que quiera mientras con nosotros no se metan. Y de paso el rédito político de una macabra ideología de confrontación constante y disolvente.
Por nuestra Patria, por la familia y sobre todo por aquellos que, aparentemente beneficiados hoy, son las verdaderas víctimas de la indiferencia e instrumentación política. Aquellos a los que debemos acompañar y ayudar, dándoles testimonio de amor y de verdadera preocupación. Legislando en lo que se pueda legislar pero no equiparando en lo que naturalmente todos sabemos no se puede equiparar.
No son los principios de un credo o un sector los que están en juego sino lo más sagrado, la simiente del hombre, la familia. Familia que desgraciadamente hoy parecieran que aquellos que detentan el poder desearían ver desaparecer.



 

EL ROCK Y UNA OPORTUNIDAD DE ENCUENTRO
 

En tiempos en donde todos contra todos, en tiempos donde nadie escucha a nadie, en tiempos donde siempre estamos solos (Fito Páez, “Al lado del camino”); “…a quién golpearle la puerta tan tarde, con quién hablar cuando no hay nadie si esta noche no puedo dormir” (La Renga, “El final es en donde partí”). “Solo como un pájaro que vuela en la noche, libre de vos peor no de mi. Vacío como el sueño de una gorra llena de nada sin saber donde ir (…) Duro como un muerto en su tumba que murió de miedo por el valor de vivir” (Callejeros, “Una nueva noche fría en el barrio”-tema muy difundido seis meses antes de Cromañon-). “Siento la desesperada gana de querer viajar con tan solo una pitada a otra realidad que sea mejor. No se si mejor pero ella gana ahora” (Las Pastillas del abuelo, “El Sensei”). O incluso aceptar que “el suicidio es la única solución” (Ozzy Osbourne, “Suicide Solution”). Sea por el camino que sea: alcohol, anorexia, pastillas, sexo, descontrol, drogas blandas o duras, el “el preboliche” una y otra vez…
“Esto no es joda voy avisando, me pongo malo y estoy de atar, sólo te cuento que estoy tratando de no perderme nunca más. Esto no es joda, sigo gritando, voy caminando y quiero volar, sólo te digo que voy tocando la rabia de los demás”…Y la impotencia ante un sistema que me encierra, supera y reduce mi libertad a “de que manera me voy a destruir si con amores o durmiendo el paladar (…) porque ahora no quiero pensar” (La Vela Puerca. “De atar”).

UNA DURA REALIDAD

Estos son algunos de los tantos mensajes que nos transmiten las letras del rock. Pero tenemos que tener cuidado con confundirnos buscando sólo fuera de nosotros un culpable. Son mensajes que no determinan una forma de ver la realidad sino que, la mayoría de las veces , simplemente la expresan, diagnostican –de forma estridente, molesta, rebelde- y ponen delante de nuestros ojos el mundo que hemos construido o dejado de construir; mundo que le da la espalda a la vida, a los valores, al amor.
Estos mensajes coreados a viva voz por 30.000 jóvenes en un recital, o escuchados en la soledad de un hogar vacío, son los que me llevaron a centrar mis clases de Filosofía en el análisis de canciones que expresan la angustia existencial de muchos de nuestros jóvenes, que viven en lo que tantas veces denominó Juan Pablo II “una cultura de la muerte”.
Pero también me permitieron encontrar en el rock un modo de comunicación y encuentro que trascendiendo el ámbito de las clases, abre un importante camino no sólo entre profesor y alumnos, sino también entre padres e hijos.
La velocidad de loa acontecimientos que se suceden, las múltiples preocupaciones cotidianas, el vivir sobreviviendo, la desintegración de la familia, la dificultad de diálogo y la falta de tiempo –no tanto en cantidad sino en calidad- para encontrarnos con nuestros hijos, nos van alejando de ellos más y más, dejándolos a veces en la más absoluta orfandad, aunque no les falte ni el buen colegio donde los podamos depositar; ni el bienestar material.
No por falta de amor; sí en general por nuestra propia inseguridad como padres, nos vamos apartando poco a poco y, cuando nos necesitan, cuando por incontables caminos nos piden que seamos sus papás, sus mamás, no podemos “decodifica”, no podemos entender su realidad ni sus demandas.
Se abre un abismo de incomunicación que confundimos muchas veces con falta de afecto y amor y que, por lo tanto, intentamos eliminar con cosas, como un cada vez más nuevo celular. O, peor todavía, abandonando nuestra verdadera misión, intentamos convertirnos en sus amigos, iniciando un proceso de adolescentización, que nos convierte en sus cómplices, sus pares, sus defensores ante el autoritarismo escolar… Y los límites desaparecen y el decir que “No” se convierte en utopía.
Nuestra actitud ante los viajes de egresados –pruebas flagrantes de inseguridad, consumismo y manipulación-, ante las fiestas y “preboliches” –donde anida el descontrol-, son algunos de los signos de los tiempos sobre los cuales deberíamos reflexionar. Pero no. No queremos o no sabemos mirar. El abismo se hace insuperable y terminamos rodeados de un halo de ingenuidad que nos aísla de su realidad. Y llega la noche, y antes de salir les pedimos que se cuiden, que se porten bien, que no se olviden de llamar. Pero dentro de nuestros pensamientos consideramos sólo los riesgos propios de nuestra generación. No estamos pensando en la fiesta donde se promueve el sexo oral ni en el Rivotril de mamá o papá que con diversas bebidas alcohólicas van a mezclar; ni en que en el “pijama party” de primer año la cerveza, el Gancia y la Sprite no pueden faltar.

SABER ESCUCHAR

“Hey Stoopid, de eso no se trata el rock and roll”, nos dice Alice Cooper, todo un ícono de la historia del rock, que fue y volvió desde el descontrol. Si nos detenemos a escuchar lo que tantas veces despectivamente llamamos “su música” –cuando no “ruido insoportable”- podríamos, aunque sin duda no sea éste el único camino, acercarnos, compartir un tiempo, entender un lenguaje que los identifica y –sin perder nuestro lugar de padres-, dialogar… no principalmente sobre música, sino sobre todos los temas sobre los cuales realmente vale la pena y no podemos dejar de hablar: el sentido de la vida, la muerte, la vocación, el amor, el encuentro interpersonal y nuestra relación con Dios. Temas de los que sí trata el rock and roll. Y quizás también, lo más sorprendente, nos llenaríamos de esperanza.
Ciertamente, en esta escucha es indispensable el juicio crítico. La rebeldía y la violencia están presentes en el rock, y la necesidad de liberarse de normas –que muchas veces no son deberes que nacen del propio ser sino que son meras imposiciones formales, que nos encierran en un mundo de prejuicios sin dejarnos crecer-, toma caminos autodestructivos que debemos denunciar. Pero hay mucho más que eso. Hay un deseo de felicidad que surge de lo más profundo del corazón, hay una búsqueda de encuentro y amor, de solidaridad, de amistad, de hogar y, como no podría faltar, de Dios y de eternidad.
“Hoy me detuve en tu mirada que raja el velo del dolor y supe que hay algo más que percibir en este mundo que todo lo muele y lo desgarra. Hoy que no hay tiempo que perder, que todo anda a reloj, que se destruye sin razón y la vida muere en un discurso
(…) y tan lejana queda la esencia que sólo el hecho de encontrarte le da sentido a mi vida” (La Renga, “El viento que todo empuja”). “Loco de pensar queriendo entrar en razón y el corazón tiene razones que la razón nunca entenderá. (…) Dame la mano, contame tu suerte; de esta manera quizás no sea la muerte la que nos logre apagar el dolor” (La Renga, “El final es en donde partí”).
“Antes cuando salía solo rompía mi nariz, pobre mi corazón sufría pero yo estaba a mil. Antes dormía todo el día para reconstruir, todas mis neuronas perdidas que se quisieron ir. (…) Pero recordé la voz de mi padre enseñándome a ver el mundo tal cual era no podía que ser que le falle a mis amigos de ayer, a los de hoy y siempre” (La mancha de rolando, “Antes”).
“Me gusta el campo a la noche (…) que la luz buena se acerque y el gran secreto me empiece a contar: que soy feliz con muy poco, un árbol y una mujer, un cielo grande, mil estrellas, ellas nunca me van a dejar caer”. (La mancha de rolando, “Dónde vamos”).

HAY ESPERANZA

En un mundo donde pareciera que el final está “teñido de negro” (MetalLica-Blackened); donde para muchos lo que queda es: “sálvate a ti mismo (…) y guarda un penique para el barquero” (Nigthwish, “Planethell”); “donde se mata el no nacido”
(Iron Maiden, “two minutes to midnight”); se levantan voces que preguntan: “¿Te arrodillas antes la cruz? (…) ¿Miras el rostro de Cristo?” (The Rolling Stones, “Blinded by Rainbows”). Voces que nos recuerdan finalmente la necesidad de ser nosotros mismos y la necesidad que tenemos que tenemos de nuestro Creador: “¿Es tu mente tan pequeña que has de seguir al rebaño? Antes de criticar deberían darse cuenta de que Dios es la única forma de amar” (Black Sabbath, “Alter for ever”).

Artículo publicado en la revista “Creciendo en familia”, Nº 13, UCA, Bs. As., Julio 2009.






Del libro La Nueva Jerusalén (pág. 173), publicado por Agape.
"En nuestra patria, afables constitucionalistas discuten a menudo acerca de la posibilidad de lograr un método para proteger la minoría. Si lograran encontrar algún método plausible para proteger la mayoría, habrían encontrado algo prácticamente desconocido en el mundo moderno. La mayoría está siempre en desventaja; las mayorías son difíciles de idealizar porque son difíciles de imaginar. La minoría es generalmente idealizada, a veces por sus sirvientes, siempre por ellas mismas. Pero tengo que confesar que mis simpatías están, generalmente, con la impotente y hasta invisible mayoría. Y mis simpatías, cuando miro a cosas que están más allá de lo que creo, están con los pobres judíos que creen en el judaísmo y todos los mahometanos que creen en el mahometanismo, para no mencionar un grupo tan oscuro como los cristianos que realmente creen en el cristianismo. Siento que tengo más en común, moralmente y hasta intelectualmente, con esas personas, y hasta con la religión de esas personas, que con las desdeñosas negaciones que constituyen la mayor parte de lo que es llamado ilustración".

Texto de Chesterton publicado en el Blog de Diego H Feijóo Cyber-Apostolado.
Pensando para y en la Inglaterra del '20 y que se aplica hoy con total actualidad a nuestra patria.